El círculo de agua
He vuelto a pensar estos días en la selva y en el viaje que hice una vez a los límites de su territorio. En aquella ocasión nadé en una piscina circular que había en el hotel en el que me hospedaba. Se me ocurre pensar ahora que el gesto casi absurdo de nadar siguiendo la forma de la pileta tuvo algo de ritual que hoy por fin he logrado comprender. Aquel movimiento infinito sirvió para que en este instante pueda escribir en este cuaderno de notas que un personaje que aún no tiene nombre espera en la habitación de un hotel de la frontera brasileña mientras observa desde la ventana de su habitación el chapoteo circular de un nadador.
0 comentarios